A finales de 2018 realizamos una encuesta a más de 200 despachos profesionales con la intención de poder dibujar cómo cambiará el sector en los próximos años.
Porque, no hay duda: estamos en un momento de profunda transformación y conocer las claves y tendencias es primordial para el futuro del sector.
El resultado lo compartimos contigo en el informe anual El Futuro de las Asesorías 2019 que puedes descargarte ahora mismo haciendo clic aquí.
Una de las preguntas los despachos contestaron (y que nosotros entendíamos como una de las más importantes de la encuesta) fue la siguiente:
“¿Cómo valoras el tiempo que dedicas a cada cliente a día de hoy?”
Esta pregunta escondía una de las cuestiones en el proceso de transformación de los despachos: ¿se está siendo eficiente en la gestión de clientes?
Los resultados fueron sorprendentes.
El 71% de los asesores encuestados siente que no es eficiente en la gestión de sus clientes:
Solo un 29% de los asesores cree dedicar el tiempo que debería a sus clientes. Es decir, que está siendo eficiente (al menos en la variable del tiempo dedicado).
Estos resultados ponen de manifiesto una profunda preocupación por mejorar la eficiencia del despacho.
Se suele decir que la eficiencia es la relación entre los recursos empleados en un proyecto y los resultados obtenidos con los mismos. Si somos capaces de conseguir el mismo objetivo con un menor número de recursos, seremos más eficientes.
En un despacho profesional existen dos recursos esenciales que hay que controlar. El primero es el conocimiento, sin él es imposible realizar ningún trabajo, y segundo y no menos importante, el tiempo.
El equilibrio entre el tiempo invertido en la gestión de cada cliente y el resultado obtenido será la manera más fácil de calcular eficiencia de nuestro despacho.
Para un despacho profesional la eficiencia permite dos cosas: en primer lugar permite dar un mejor servicio a tus clientes y en segundo lugar, permite poder gestionar más clientes en el mismo número de horas.
Es vital conseguir la mayor eficiencia porque impacta directamente sobre la rentabilidad del negocio.
Según los resultados de la encuesta, muchos asesores tienen dificultades para ser eficientes y, por tanto, sus despachos no están obteniendo la rentabilidad que podrían conseguir si optimizaran su gestión.
En el caso de nuestro informe anual, hemos detectado dos fuentes de la falta de eficiencia:
Aquellos que creen que dedican demasiado tiempo a cada cliente, lo que subyace es que necesitan reducir el tiempo de gestión de cada uno y centrarse en aquellas acciones que ofrecen valor al servicio. Es decir: necesitan dedicar menos tiempo a tareas de gestión que no aportan valor añadido, optimizando así el tiempo dedicado a cada cliente.
Del mismo modo, en los que creen no dedicar suficiente tiempo a sus clientes, tiene una causa similar. Comprenden que las necesidades de sus clientes no terminan con las tareas de gestión, pero el volumen de trabajo les sobrepasa y no pueden dar el servicio que de verdad desean. Por tanto, lo que reclaman es ganar tiempo de calidad con ellos para ofrecerles más valor (conocimiento).
Para ello deberás encontrar las herramientas que te permitan automatizar tareas ineficientes que no aportan un valor real a tu servicio.
Es decir, deberás reducir el tiempo que se dedica a tareas de gestión y utilizar ese tiempo dedicado a los clientes con tareas o acciones con más valor para ellos.
Afortunadamente las tareas que más tiempo consumen en un despacho profesional ya pueden ser fácilmente automatizadas en su mayoría.
Por ejemplo:
Anfix permite extraer de forma automática la información de facturas y tickets y te propondrá un asiento contable para que no tengas que generarlo manualmente. También te propondrá la conciliación bancaria de forma automática para que no pierdas ni un minuto.
Con este sistema podrás reducir en un 80% el tiempo que antes empleabas en tareas de gestión.
Sin embargo es importante que un asesor siempre tenga el control absoluto de todas esta tareas siempre que lo desee.
De esta manera, el despacho se puede olvidar de mecanizar datos (sin duda, una de las tareas más ineficientes del despacho) para pasar a ser un supervisor de esos datos. Dicho de otra manera: la automatización de los procesos no elimina la figura del asesor, pues su conocimiento es el recurso más importante del servicio y por lo que hoy los clientes pagan a las asesorías.
Ofreciendo un mejor servicio y aumentando tu eficiencia, podrás hacer que tu negocio prospere y tus clientes permanezcan a tu lado durante mucho tiempo.
¿Qué opinas? ¿Crees que eres eficiente en la gestión de tus clientes? Si quieres que te enseñemos cómo Anfix ayuda a los asesores a ser más rentables, solicita una reunión con uno de nuestros expertos en despachos profesionales que te enseñará cómo trabajar con Anfix y responderá a todas tus dudas.
Eva Fernández
Periodista con más de 10 años de experiencia en marketing digital y, en especial, en la generación de contenidos para marcas de diferentes sectores. De la mano de Anfix y con mi propia experiencia emprendiendo como freelance, he aprendido mucho en los últimos años sobre gestión del negocio, finanzas y productividad.