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REBU: qué es, cómo funciona y cuándo se aplica

Si estás pensando en comprar o vender productos de segunda mano esto te interesa.

REBU: qué es, cómo funciona y cuándo se aplica
Eva Fernández

En este articulo verás:

Si estás pensando en comprar o vender productos de segunda mano en el marco de una actividad económica, es muy probable que te topes con un término que, aunque no es nuevo, genera muchas dudas: el REBU.

Esta sigla hace referencia al Régimen Especial de Bienes Usados, una modalidad fiscal del IVA que afecta a ciertos bienes cuando se revenden. Y créeme, entenderlo bien puede marcar la diferencia entre hacer las cosas correctamente… o meterte en un buen lío con Hacienda.

En este artículo te voy a explicar todo lo que necesitas saber sobre el REBU, con ejemplos, aclaraciones y, sobre todo, de forma sencilla y práctica.

¿Qué es el REBU?

El REBU, o Régimen Especial de Bienes Usados, es un régimen especial del IVA que pueden aplicar determinados revendedores cuando venden bienes usados, objetos de arte, antigüedades o bienes de colección.

Su principal característica es que el IVA no se calcula sobre el precio total de venta, sino sobre el margen de beneficio del vendedor. Es decir, en lugar de pagar el IVA por el total que tú cobras al cliente, lo haces solo por la diferencia entre lo que pagaste por el bien y lo que obtuviste al venderlo. Este sistema es especialmente útil cuando se revenden productos adquiridos a particulares u otras personas que no te repercutieron IVA al vendértelos.

¿Por qué existe este régimen?

La lógica detrás del REBU es sencilla. Imagina que compras un coche de segunda mano a un particular por 5.000 euros y lo revendes por 6.000 euros. Si aplicas el IVA sobre el total de 6.000, estarías pagando un impuesto sobre un importe en el que ya no se ha generado un valor añadido completo, ya que tú solo ganaste 1.000 euros.

El REBU corrige esta distorsión. Hacienda entiende que solo debe aplicarse el IVA sobre tu ganancia real, es decir, sobre esos 1.000 euros. De esa forma, el impuesto es más justo y coherente con la lógica del sistema del IVA, que grava el valor añadido y no las simples transacciones.

¿Quién puede aplicar el REBU?

Aquí viene una de las primeras confusiones. No todas las empresas o autónomos pueden aplicar el REBU, y no en todas las operaciones. Este régimen está pensado exclusivamente para revendedores que cumplan ciertas condiciones.

Tú puedes aplicar el REBU si:

  • Eres empresario o profesional a efectos de IVA.
  • Compras bienes usados, objetos de arte, antigüedades o de colección con el propósito de revenderlos.
  • Has adquirido estos bienes sin deducirte IVA en la compra. Es decir, generalmente, se los compras a particulares o a otros empresarios que no te repercuten IVA (por ejemplo, porque ellos están en régimen especial de agricultura o en régimen de franquicia).

En resumen, si compras un bien para revenderlo y en la operación de compra no se repercutió IVA, entonces puedes aplicar este régimen especial en la venta.

¿Qué se considera "bien usado"?

No vale cualquier cosa. Según la normativa, se considera bien usado aquel bien corporal mueble que puede volver a ser utilizado en su estado actual o tras una reparación, sin que sea necesario un proceso de fabricación adicional.

Es decir, hablamos de productos físicos que se revenden. Esto incluye, por ejemplo:

  • Vehículos de segunda mano.
  • Electrodomésticos.
  • Muebles.
  • Ropa.
  • Teléfonos móviles.
  • Cámaras de fotos, ordenadores y otros aparatos tecnológicos.

Por otro lado, también entran en este régimen:

  • Objetos de arte.
  • Antigüedades.
  • Bienes de colección.

Pero ojo, no se incluye cualquier cosa que ya se haya utilizado. Para que un producto entre dentro del REBU, tiene que haber sido adquirido sin IVA deducible, y no basta con que esté usado: tiene que cumplir los requisitos del reglamento.

¿Cómo funciona el REBU?

Ahora vamos al meollo del asunto. El REBU modifica la forma en que declaras y calculas el IVA. Veámoslo paso a paso:

Cálculo del margen de beneficio

En lugar de aplicar el 21 % de IVA sobre el precio total de venta, el régimen te permite calcular el IVA solo sobre el margen de beneficio. Este margen es la diferencia entre el precio de venta y el precio de compra (más ciertos costes asociados, como reparaciones o comisiones).

Ejemplo práctico:

  • Compras un móvil a un particular por 200 €.
  • Lo vendes por 300 €.
  • Tu margen de beneficio es de 100 €.

El IVA se aplica solo sobre esos 100 €. Si estamos en régimen general, tributarías 63 € (300 / 1,21). Con REBU, tributas 100 / 1,21 = 82,64 € base imponible, y el IVA serían 17,36 €.

No se desglosa el IVA en la factura

Una peculiaridad del REBU es que no puedes desglosar el IVA en la factura. El cliente solo verá el precio final. Esto es importante porque significa que si vendes a empresas o autónomos, ellos no podrán deducirse el IVA, ya que no aparece desglosado.

Por tanto, este régimen está pensado sobre todo para ventas a particulares.

¿Cuáles son las ventajas del REBU?

Usar el REBU puede ser muy interesante en ciertos sectores, sobre todo si trabajas con productos de segunda mano o con objetos que adquieres a particulares. Algunas de sus ventajas más destacadas son:

  • Pagas menos IVA, ya que solo tributas por tu margen.
  • Simplifica el cálculo fiscal, en muchos casos.
  • Te permite ofrecer precios más competitivos.
  • Evita distorsiones fiscales cuando compras sin IVA.

Eso sí, hay que tener cuidado con cómo se lleva la contabilidad, porque la Agencia Tributaria exige un libro de registro específico para estas operaciones.

¿Cuándo no se puede aplicar el REBU?

Hay muchas situaciones en las que no puedes acogerte a este régimen, aunque el producto sea de segunda mano. Por ejemplo:

  • Si compras el bien a un proveedor que sí te repercute IVA deducible.
  • Si tú mismo fabricas el producto (aunque sea con piezas usadas).
  • Si no eres revendedor habitual.
  • Si compras el bien para usarlo en tu empresa y luego decides venderlo.

En todos estos casos, tendrías que aplicar el régimen general del IVA, y por tanto calcular el impuesto sobre el total del precio de venta.

¿Cómo se lleva la contabilidad en el REBU?

Uno de los puntos más delicados del REBU es la contabilidad. Para evitar problemas, debes llevar un libro de registro de bienes usados donde anotas cada operación de forma separada.

Este libro debe incluir:

  • Fecha de adquisición.
  • Identificación del bien.
  • Precio de compra.
  • Precio de venta.
  • Margen obtenido.
  • Método de cálculo (si es por operación individual o global).

Es importante que tengas toda esta información bien organizada, ya que Hacienda puede solicitarla en cualquier momento.

¿Qué métodos existen para calcular el margen?

La normativa te permite elegir entre dos formas de calcular el margen:

Margen por operación

Se calcula el margen beneficio de cada operación individual. Es el método más común cuando se trata de objetos de cierto valor o cuando no haces muchas ventas al mes.

Margen global

Este método permite sumar todas las compras y todas las ventas en un periodo, y calcular el margen del total. Se suele usar en comercios que tienen un volumen alto de pequeñas operaciones, como tiendas de segunda mano o de antigüedades.

Eso sí, no puedes aplicar ambos métodos a la vez: tienes que elegir uno y mantenerlo durante todo el año.

¿Qué ocurre si aplicas mal el REBU?

Este es un tema delicado. Aplicar incorrectamente este régimen puede traerte problemas serios. Si Hacienda detecta que usaste el REBU en operaciones donde no correspondía, o si calculaste mal los márgenes, puede exigirte:

  • El pago del IVA no ingresado.
  • Intereses de demora.
  • Sanciones económicas.

Por eso siempre recomiendo que, si tienes dudas, consultes con un profesional o, si estás empezando, empieces aplicando el régimen general hasta tenerlo todo claro.

¿En qué sectores es más habitual el uso del REBU?

Este régimen se utiliza sobre todo en:

  • Compraventa de vehículos de ocasión.
  • Tiendas de segunda mano.
  • Comercios de arte y antigüedades.
  • Venta de productos electrónicos reacondicionados.
  • Plataformas de compra-venta que trabajan como intermediarios.

Cada uno de estos sectores tiene sus peculiaridades, pero en todos ellos el REBU representa una forma de ajustar la fiscalidad a la realidad del negocio.

¿Qué ocurre con las exportaciones y ventas intracomunitarias?

Otro punto importante. Si aplicas el REBU, debes tener cuidado con las operaciones fuera del país:

  • Exportaciones: No se aplica el REBU. Estas operaciones están exentas de IVA si se cumplen los requisitos legales.
  • Ventas intracomunitarias: Tampoco se puede aplicar el REBU. Se trata como una entrega intracomunitaria exenta si el comprador está identificado con NIF-IVA en otro Estado miembro.

En ambos casos, debes aplicar el régimen general y seguir la normativa correspondiente.

El REBU puede parecer complejo al principio, pero una vez entiendes cómo funciona, verás que es una herramienta poderosa para quienes se dedican a revender bienes usados. Te permite ajustar el IVA a tu margen real, evitar cargas fiscales excesivas y operar de forma más justa en el mercado.

Eso sí, no es un régimen que se pueda aplicar a la ligera. Requiere llevar una contabilidad ordenada, saber a quién compras y a quién vendes, y tener claras las reglas del juego. Si cumples con los requisitos y lo aplicas bien, puedes obtener importantes beneficios fiscales y operativos en tu negocio.

Si estás empezando a revender productos de segunda mano, o si ya lo haces y nunca habías oído hablar del REBU, este puede ser el momento perfecto para revisar cómo estás gestionando tu IVA y decidir si este régimen es para ti.

Datos de interés

  • Crecimiento del comercio electrónico de bienes de segunda mano: En el tercer trimestre de 2023, el volumen de negocio del comercio electrónico de bienes de segunda mano en España superó por primera vez los 100 millones de euros. Esta tendencia continuó en los trimestres siguientes, alcanzando en el primer trimestre de 2024 un valor aproximado de 149,38 millones de euros en transacciones dentro de este sector.
  • Facturación total del mercado de segunda mano en España: La venta de productos usados se ha afianzado en España, alcanzando una facturación de 5.500 millones de euros. Este incremento se ha visto impulsado por la inflación, el alza de precios y una mayor sensibilidad de los españoles hacia el consumo colaborativo y el medio ambiente.
  • Productos de segunda mano más adquiridos: En 2023, más del 30% de los españoles encuestados habían adquirido libros o discos de segunda mano durante los 12 meses anteriores a la encuesta, destacando estos productos como los más populares en el mercado de bienes usados.
  • Incremento del precio de los coches usados: El precio medio de los coches de segunda mano en España ha aumentado un 85% en la última década, situándose en 20.634 euros. Este incremento refleja la creciente demanda y valor de los vehículos usados en el mercado actual.
  • Crecimiento global del mercado de ropa de segunda mano: Según el informe 'Resale Report 2023' elaborado por la plataforma de segunda mano ThreadUp, el mercado de ropa de segunda mano podría alcanzar los 351.000 millones de dólares en todo el mundo. Este mercado ya creció un 28% en 2022, alcanzando los 177.000 millones de dólares respecto a los datos de 2021 (138.000 millones de dólares).

Preguntas frecuentes sobre el REBU (Régimen Especial de Bienes Usados)

¿El REBU es obligatorio o puedo elegir no aplicarlo?

El REBU no es obligatorio, es un régimen opcional. Puedes optar por no aplicarlo y tributar por el régimen general del IVA, aunque en muchos casos resulta fiscalmente más ventajoso usar el REBU si cumples los requisitos.

¿Puedo aplicar el REBU si compro productos en Wallapop o Milanuncios?

Sí, siempre que adquieras los bienes como parte de tu actividad económica (por ejemplo, para revenderlos) y los compres a particulares que no te hayan repercutido IVA, puedes aplicar el REBU en su posterior venta.

¿Cómo afecta el REBU a la factura que entrego al cliente?

Con el REBU, no se puede desglosar el IVA en la factura. Solo debes indicar el precio total. Además, tienes que añadir una nota que indique que se trata de una operación acogida al Régimen Especial de Bienes Usados.

¿Puedo usar el REBU si vendo a otros autónomos o empresas?

Sí, puedes, pero hay que tener en cuenta que ellos no podrán deducirse el IVA, ya que no aparecerá desglosado. Por eso, este régimen es más habitual en operaciones con particulares.

¿Qué pasa si combino bienes en REBU con bienes del régimen general?

En ese caso, deberás llevar una contabilidad separada y asegurarte de aplicar correctamente cada régimen a las operaciones correspondientes. No puedes mezclar los criterios en una misma venta.

¿El REBU se aplica también a servicios o solo a productos?

El REBU solo se aplica a bienes. No es aplicable a servicios. Está pensado exclusivamente para la reventa de productos físicos, como coches, ropa, muebles, tecnología, etc.

¿Qué ocurre si aplico el REBU por error en una operación que no cumple los requisitos?

Si Hacienda detecta que aplicaste el REBU de forma incorrecta, puede exigirte que reliquides el IVA conforme al régimen general, con intereses y posibles sanciones. Por eso es fundamental verificar que cada operación cumple los criterios.

¿Puedo deducirme el IVA de los gastos asociados a los bienes en REBU?

No, si aplicas el REBU, no puedes deducirte el IVA ni del bien adquirido ni de los gastos directamente relacionados con ese bien (como reparaciones o transporte). Solo tributas sobre el margen.

¿Hay alguna declaración especial que deba presentar si uso el REBU?

No existe un modelo específico, pero sí debes anotar todas las operaciones en el libro registro específico de bienes usados y reflejarlas correctamente en tus modelos de IVA, especialmente en el modelo 303.

¿Puedo cambiar de REBU al régimen general durante el año?

No puedes ir alternando. Si eliges aplicar el REBU, debes mantener ese criterio durante todo el ejercicio fiscal para ese tipo de bienes. Cambiar de régimen requiere hacerlo al inicio del año o justificarlo adecuadamente.