Ante la caída de ventas por la crisis económica es muy habitual que los propietarios se pregunten cómo reducir gastos en una empresa. Aunque antes de darte unos consejos sobre cómo hacerlo te diré, fruto de mi experiencia como consultor, que reducir gastos es una medida limitada. Y a veces más de lo que parece, porque cualquier empresa tiene unos gastos inherentes propios de su modelo de negocio.
Por ejemplo, no tiene los mismos gastos un hotel de cuatro estrellas que uno de cinco. El cliente tiene unas expectativas de servicio en base a lo que paga, y por eso ante cualquier propuesta de reducción de gastos lo primero de todo es ponerse en la piel del cliente. Y si crees que la reducción afectará al nivel de calidad percibido por el cliente para tu producto o servicio, mejor que no la ejecutes.
Antes de hablar de estrategias para reducir gastos, quiero hacer una puntualización propia de la teoría contable o financiera: no es lo mismo un gasto que un coste. Simplificando mucho, un coste es un gasto imprescindible para producir el producto o servicio que vendes en tu negocio. Por ejemplo, estar suscrito a una revista no es fundamental para el cliente salvo que de ella dependan los conocimientos que ofreces. Aunque normalmente coste y gasto se usan como sinónimos, y así lo haré yo en este post.
Lo primero de todo antes de reducir gastos es conocer cuál es tu estructura de costes. Lo cual dependerá de tu actividad y modelo de negocio. Pero, ¿sabes por qué es tan importante conocer esa distribución?. Porque sólo así sabremos qué relación hay entre nuestro nivel de producción (unidades físicas o número de clientes) y el volumen de gastos.
Por ejemplo en un Restaurante la mayoría de los gastos son fijos (personal y local principalmente) y el resto variables en función del consumo de comida y bebida. Los primeros no varían a mayor o menor número de clientes, pero los segundos sí que lo hacen. Por lo que es más fácil reducir el coste de las bebidas cuando vendemos muchas y por lo tanto mayor compra hacemos al proveedor, ya que mejor precio nos podrá dar éste.
Otra forma de analizar la estructura de costes es diferenciar entre directos e indirectos. Quizás ésta forma te sea más confusa, pero básicamente diferencia entre aquellos gastos que se incluyen para producir el producto y aquellos que se usan para una gran variedad de productos.
Volviendo al caso del Restaurante, el coste directo en un refresco sería la propia bebida, el hielo y la rodajita de limón. Mientras que el camarero o el vaso sería un coste indirecto porque se utilizan en otras bebidas. Te explico todo esto porque dependiendo de qué tipo de actividad y modelo de negocio tendrás que aplicar una u otra clasificación de cara al análisis y posterior reducción de costes.
Por ejemplo:
Una vez que tenemos clara nuestra estructura de gastos, debemos de tener en cuenta en qué etapa se encuentra nuestro negocio, porque la estrategia será diferente:
Ahora sí, empecemos con las medidas que debes tomar para reducir los gastos de tu negocio.
Vamos a ver medidas concretas para que puedas reducir gastos en una empresa, tanto si es de servicios como si fabrica productos.
Todas las empresas tienen una estructura de costes mínima que no se puede reducir sin afectar a la calidad percibida por el cliente. Estructura consecuencia del modelo de negocio elegido, en base a la calidad y al tipo de cliente al que te dirijas. Y que además esa estructura se puede clasificar de varias formas, por ejemplo distinguiendo entre costes fijos y variables.
Dependiendo de cómo se comporten los gastos en función de las ventas. Pues bien, una vez que sabes identificar los principales tipos de costes, que sabes cuál es tu estructura, y que has identificado la etapa en la que se encuentra tu negocio, ya puedes empezar a aplicar las medidas que propongo a continuación:
Eva Fernández
Periodista con más de 10 años de experiencia en marketing digital y, en especial, en la generación de contenidos para marcas de diferentes sectores. De la mano de Anfix y con mi propia experiencia emprendiendo como freelance, he aprendido mucho en los últimos años sobre gestión del negocio, finanzas y productividad.
Por Eva Fernández el 8 julio 2024