El gobierno ha puesto en marcha recientemente un nuevo plan de contratación para jóvenes: el Sistema Nacional de Garantía Juvenil. El sistema consiste en una serie de medidas dirigidas a incentivar a las empresas que formalicen contratos indefinidos con menores de 25 años o de 30, si tuvieran una discapacidad igual o superior al 33%.
Las bonificaciones aplicables por las empresas que celebren estos contratos son las siguientes:
La tarifa joven: bonificación de 300 euros en los costes sociales de la empresa durante un máximo de 6 meses. La empresa deberá mantener al trabajador en plantilla al menos durante seis meses desde el inicio de la relación laboral. De no ser así, tendrá que reintegrar las cantidades bonificadas.
Cada nueva contratación deberá suponer un incremento del nivel de empleo, indefinido y total, de la empresa. El nivel adquirido se mantendrá durante todo el periodo de disfrute de la bonificación. El incentivo podrá aplicarse en contratos a media jornada, reduciéndose la cantidad percibida de manera proporcional. El mismo beneficiario tan solo dará derecho a una única bonificación.
Contratos para la formación y el aprendizaje: se prevé un incremento de la cuantía máxima de las bonificaciones aplicables en este tipo de contratos, a la vez que se suprimirá la obligatoriedad de disponer de un tutor para cada trabajador contatado bajo esta modalidad.
Contratos en prácticas: estos contratos disfrutarán de una bonificación de las cotizaciones de la empresa a la Seguridad Social por continencias comunes de un 100%, cuando hasta ahora tenían el 50%.
Contratos a tiempo parcial con vinculación formativa: extensión de los incentivos aplicables en este tipo de contratos a las personas inscritas en el sistema Nacional de Garantía Juvenil, es decir menores de 25 o de 30 si son discapacitados de grado igual o superior al 33%.
