¿Qué son las ganancias retenidas?
Las ganancias retenidas son los beneficios obtenidos por la empresa que se quedan en la propia empresa para incrementar sus recursos y no se reparten a los accionistas.
Una vez que se cierra el ejercicio anual de una empresa, si su resultado es positivo es que ha obtenido beneficios. Los socios deben decidir el destino de esos beneficios. Pueden decidir:
- Repartirlos entre ellos en forma de dividendos, como contraprestación por la inversión que han realizado.
- Dejarlos en la empresa como reservas.
- Optar por una fórmula mixta (repartir solo una parte).
Si las ganancias se quedan en la empresa, pueden servir para financiar futuras inversiones o para afrontar pérdidas futuras.
Las ganancias retenidas son una garantía de liquidez. Pueden evitar que la empresa tenga que acudir al endeudamiento externo para afrontar sus pagos.
Las ganancias retenidas en el patrimonio neto
Las ganancias retenidas forman parte del patrimonio neto.
La Ley establece la creación de unas reservas obligatorias que deben alcanzar el 20% del capital social.
Además, en los estatutos de la empresa, los socios pueden acordar que se destine anualmente un porcentaje de los beneficios a estas reservas.
Las ganancias retenidas que no se encuentran en alguno de los conceptos anteriores se consideran reservas voluntarias.