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En el marco del sistema laboral español, la categoría profesional y el grupo de cotización son dos conceptos fundamentales que determinan diversos aspectos relacionados con el trabajo, como el salario, las prestaciones sociales, los derechos laborales y las responsabilidades asociadas a cada puesto.
Estos elementos constituyen una estructura jerárquica que organiza y clasifica a los trabajadores en función de sus competencias, responsabilidades y cualificaciones.
¿Qué es la categoría profesional?
Tras la reforma laboral de 2012 y la última reforma de 2022, el concepto de categoría profesional ha dejado de existir.
Antiguamente, este término figuraba en los contratos laborales y servía para clasificar el tipo de trabajo a realizar, además de establecer el porcentaje de cotización a la Seguridad Social.
Las categorías profesionales eran un punto clave en los convenios colectivos, ya que determinaban el salario mínimo asociado, otorgando así una gran relevancia a la clasificación en una u otra.
Desde la mencionada reforma, las categorías profesionales evolucionaron hacia los grupos profesionales.
¿Qué son los grupos profesionales?
Actualmente, con la introducción de estos grupos, se consideran las particularidades del puesto laboral, las responsabilidades, las tareas a desempeñar y los conocimientos requeridos, entre otros aspectos.
La focalización ya no se centra en elementos como la titulación académica o la experiencia del trabajador.
Diferencia entre categoría profesional y grupo profesional
La diferencia entre categoría y grupo es que el grupo es un concepto más amplio, puesto que tiene en cuenta la aptitud profesional, la titulación y el contenido general del puesto de trabajo, e incluye a su vez, distintas tareas, funciones, especialidades y responsabilidades.
La categoría tan solo hace referencia a la aptitud y la capacitación personal del trabajador. Es un concepto más rígido que asigna al trabajador una labor determinada.
El grupo, sin embargo, permite la movilidad funcional, reajustando el puesto a las necesidades de la empresa y a la estructura organizativa que se requiera en cada momento.
Cada grupo incluye diferentes subgrupos, dependiendo del mayor o menor grado de responsabilidad del puesto de trabajo y de los distintos perfiles profesionales que engloba.
La retribución se realiza en base a la asignación del trabajador en uno u otro, pudiendo valorarse adicionalmente otros conceptos como la competitividad y la productividad en el desempeño del puesto.
La nueva clasificación en grupos permitirá a la empresa reubicar al trabajador en un puesto de trabajo distinto con mayor facilidad, ya que un mismo grupo contempla muchas funciones.
En definitiva, se trata de un mecanismo de flexibilidad que pretende evitar la eliminación de puestos de trabajo, lo que supone grandes ventajas para la empresa, pero no así para el trabajador.
¿Qué es un grupo de cotización?
La Seguridad Social define los grupos de cotización como:
Las categorías o grupos profesionales que le corresponden al trabajador de acuerdo con la actividad o puesto de trabajo que desempeña, atendiendo a criterios establecidos en el convenio colectivo de aplicación en la empresa.
Actualmente existen once grupos de cotización con sus bases asignadas.
Ser parte de un grupo de cotización u otro conlleva diferencias en la base mínima y máxima de cotización.
La variación en la base máxima no es tan significativa, ya que permanece constante para los distintos grupos (del 1 al 7 en el cálculo mensual y del 8 al 11 en el cálculo diario). No obstante, resulta crucial en el cálculo del salario mínimo y en situaciones de despido y reincorporación tras una excedencia voluntaria.
