El ciclo de vida de un producto es un análisis básico en toda empresa o negocio, porque de ello depende la supervivencia a largo plazo.
Todos los mercados pasan por ciclos, a veces por cuestiones de la economía global pero otras muchas por cambios en los gustos. Es en este último caso donde el análisis del ciclo de vida de un producto se vuelve clave. La innovación y el lanzamiento de productos nuevos debe de ser una tarea rutinaria para poder satisfacer siempre a un mercado cambiante, y no pienses que esto es sólo para grandes empresas, como verás cualquier negocio tiene productos con ciclos de vida diferentes, lo que se traduce en diferentes estrategias para maximizar los ingresos. En concreto las fases del ciclo de vida de un producto son las siguientes:
- Testeo: como te decía es fundamental que pruebes y busques productos innovadores para mantenerte siempre en el mercado según las últimas tendencias y gustos. Para ello muchas veces no es necesario crear nada nuevo, sino traer productos de otros países, lugares o proveedores que nos puedan permitir hacer pruebas en nuestro mercado. En el caso de empresas industriales la innovación supone un proceso más complejo a través de la investigación, el desarrollo y la innovación.
- Creación: sería la continuación de la fase anterior para aquellas empresas que fabrican, pero en el caso de empresas que simplemente comercializan productos de otros, esta fase se juntaría con la anterior dentro del ciclo de vida de un producto.
- Lanzamiento: a diferencia de la primera fase en ésta hay que centrar todos los esfuerzos en marketing para dar a conocer el producto a través de las diferentes acciones de promoción.
- Introducción: como en casi todas las cosas de la vida, lo que mal empieza mal acaba, así que la fase de introducción es una fase crítica dentro del ciclo de vida de un producto. Corregir los errores en los primeros momentos hará que las primeras ventas pueden tirar de otras gracias al boca a boca positivo de los primeros clientes del nuevo producto.
- Ordeño: ésta es la fase donde están los mayores beneficios dentro del ciclo de vida de un producto, por ello tu objetivo es alargarla lo máximo posible. Es decir, que el producto se asiente en una tendencia de consumo en vez de en una moda pasajera.
- Declive: como su propio nombre indica es la fase final del ciclo de vida de un producto, y antes de su inicio deberías de tener otros productos en las fases 4 y 5 para que tu nivel de ingresos no se resienta. A veces un producto en fase de declive se puede recuperar pero lo normal es que haya que eliminarlo. Todo dependerá de la fidelidad y satisfacción de sus clientes actuales.
De las fases anteriores las tres primeras suponen más inversión que beneficios, por eso es importante equilibrar nuestra cartera de productos según el análisis del ciclo de vida de un producto.